Consejos para ser árbitro de fútbol: requisitos, preparación física, material, reglamento, señales y más

El árbitro de fútbol es la persona encargada de hacer que se cumplan las reglas durante el tiempo que dura el partido. Las normas son establecidas por la FIFA y también se encargan de llevar el tiempo del partido e informar de todo lo que ocurra en él.

Hay muchos aspectos a tener en cuenta cuando te planteas ser árbitro de fútbol. Es por eso por lo que vamos a ayudarte a conocer los gestos y características para hacer más fácil tu toma decisión y te animes a dar el salto definitivo apuntándote a un curso para ser árbitro de fútbol.

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Estas son las principales cualidades que debes tener para poder ser el mejor árbitro de fútbol:

Conoce el reglamento a la perfección

El primer y fundamental paso que debes seguir si quieres convertirte en árbitro de fútbol es conocer a la perfección el reglamento.

Un árbitro profesional es aquel que pita el partido haciendo saber que es él quien mejor conoce las reglas de juego. Los árbitros son los que determinan si se ha infringido alguna regla o no, pero, además, poseen excelentes dotes de comunicación así como un perfecto conocimiento del deporte que está arbitrando. Además, nadie mejor que los árbitros conoce las señales que se deben hacer durante un partido.

Mucha gente conoce las normas básicas del fútbol pero para ser árbitro, eso no basta. El reglamento oficial de fútbol que controla y modifica la FIFA año tras año, esconde cantidad de puntos que seguramente desconozcas. Es por este motivo por el que todos los árbitros deben pasar exámenes anuales para medir el nivel de sus conocimientos con respecto al reglamento.

Durante un partido de fútbol pueden surgir jugadas de lo más extrañas en las que, ahora mismo, no sabrías que hacer. Todas ellas están recogidas en el reglamento oficial, por eso es tan importante conocerlo a la perfección.

Ten personalidad

Para ser árbitro de fútbol es muy importante mostrar una personalidad firme y demostrar que el partido no se te va a escapar de las manos. Desde el primer minuto, debes imponerte a los jugadores para que te tomen en respeto y sepan que eres tú quien manda en el partido.

Puedes ser más o menos simpático en el terreno de juego (según cual sea tu carácter y el momento en el que te encuentres), pero nunca debes permitir que se te suban a las barbas. Tú mandas sobre los jugadores y el cuerpo técnico y debes tener controladas todo tipo de situaciones.

La imagen que proyectes desde el minuto uno, va a ser la que te acompañe durante todo el partido (o incluso más que eso). Por eso destacamos la importancia que tiene este aspecto para poder ser un gran árbitro de fútbol.

Sé dialogante

A pesar de mostrar tu carácter y tener el control absoluto del partido, para ser considerado un buen árbitro de fútbol, incluso por los propios jugadores, debes tener las manos siempre abiertas al diálogo.

Explica a los jugadores y cuerpo técnico el porqué de tus decisiones para hacerles entrar en razón (cosa que no siempre funciona). Es importante que te entiendan y sepan el motivo de tus decisiones en el terreno de juego. A veces esto te puede ayudar para que empaticen contigo.

Habla con los jugadores durante el partido, no en abundancia, pero sí cuando lo consideres oportuno. Avísales cuando tengas que hacerles alguna apreciación y estate atento a cualquier discusión para intentar tranquilizar la situación y, si hace falta, amonestar a algún jugador.

Preparación física de un árbitro de fútbol

Si quieres ser un buen árbitro de fútbol, debes tener un buen nivel físico para aguantar todo un partido en el que tienes que dar el 100%. Los partidos se pueden hacer muy largos y los campos son de un tamaño considerable. Es por esto por lo que te recomendamos que hagas buenos ejercicios de calentamiento y así evitar lesiones.

El interés físico que puedas tener para querer ser un buen árbitro de fútbol no es meramente personal. Todas las federaciones realizan unas pruebas físicas que deberán pasar todos los candidatos que quieran convertirse en árbitros. Además, también existen pruebas anuales para los árbitros que ya ejercen como tales. Con estas pruebas miden el estado físico de cada uno y se hace un informe en el que decretan si estás preparado físicamente (o no) para ejercer de árbitro de fútbol.

Por eso te recomendamos que tengas una actividad física activa. Haz ejercicios, sal a correr, ve al gimnasio… si tienes una vida deportiva activa y sigues una dieta medianamente saludable, no tendrás ningún tipo de problema para estar preparado físicamente.

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Conoce las señales de un árbitro de fútbol

Un árbitro de fútbol está constantemente haciendo señales con sus brazos mientras hace uso de su silbato. Muchos de estos signos son mundialmente conocidos pero hay otros que no.

Si escuchas el silbato de un árbitro de fútbol es porque algo tiene que notificar, normalmente una falta o interrupción del juego. Un pitido corto y rápido indica una falta menor sancionada solamente con un tiro libre. Un pitido más fuerte y largo indica una falta más grave sancionada con tarjeta o tiros desde el punto penal.

Para ir conociendo las diferentes señales, es bueno fijarse en la posición de las manos del árbitro:

• Si el árbitro tiene el brazo levantado señalando hacia delante indica que está ordenando un tiro libre directo, suele ir acompañado de un golpe de silbato.
• Si el árbitro levanta la mano por encima de su cabeza después de la señalización de un tiro libre indica un tiro libre indirecto. El árbitro mantendrá su mano levantada hasta después de que otro jugador haya tocado el balón de fútbol. También va acompañado de un pitido de silbato.
• Si el árbitro señala con los dos brazos hacia delante es porque se ha cometido una falta pero ha decidido aplicar la ley de ventaja.
• Hay otras señales que el árbitro puede hacer con los brazos, como por ejemplo si señala a portería de fútbol con el brazo recto paralelo al suelo quiere indicar un saque de portería y si señala al banderín de esquina con el brazo apuntando hacia arriba indicará un tiro de esquina.

Ten el material adecuado de un árbitro de fútbol

Un árbitro de fútbol no puede saltar al terreno de juego sin el material adecuado.

Tu federación te dará las equipaciones pertinentes al principio de temporada; camisetas, pantalones, medias y botas para que vistas como es adecuado a la hora de arbitrar.

Por otro lado hay una serie de complementos que debes adquirir tú por tu parte. Lo más imprescindible es, como no podía ser de otra manera, el silbato. Compra un buen silbato ya que necesitas que los jugadores te escuchen en todo momento y debe sobrepasar el posible sonido ambiente que haya. Por otro lado, también debes contar con un buen reloj para cronometrar las partes y llevar el tiempo del partido. Antes de usarlo por primera vez lee bien las instrucciones de uso para evitar cualquier tipo de problema. Y para acabar, las dos tarjetas; la amarilla y la roja. Llévalas siempre encima cuando vayas a arbitrar, de lo contrario puede suponer un problema.

Además, si te toca ser linier en algún partido, debes llevar siempre encima el banderín para señalar las fueras de banda, fueras de juego o posibles infracciones que quieras señalarle al árbitro principal.

No lo hagas solo por el dinero

El factor económico es claramente un gran aliciente para ser árbitro de fútbol, pero no debe ser tu único objetivo.

Hay muchos motivos por los que uno quiere convertirse en árbitro de fútbol, y la remuneración a final de mes está entre las principales. A pesar de ello, no dejes que esta sea tú única y prioritaria motivación. No debes olvidar lo que cobras pero debes centrar tu trabajo en realizar bien las tareas como árbitro. Es más importante conocer a la perfección el reglamento que no conocer a la perfección lo que te toca cobrar cada mes.

Si no centras tu trabajo en el terreno de juego, tus resultados como árbitro no serán positivos y, por lo tanto, tu salario no aumentará. Es por esto por lo que te recomendamos que te centres en lo meramente profesional y ya verás como tus ingresos irán en aumento.

Has de saber que por mucho que puedan llegar a pagarte como árbitro de fútbol, rara vez se ha dado el hecho de que alguien se dedique plenamente a ello. No dejes de lado tus estudios u otros trabajos. Intenta ver el arbitraje como algo complementario que te enriquece.

Ten paciencia y disfruta del arbitraje

Con los años, si realizas tu trabajo como árbitro de fútbol con total profesionalidad, irás ascendiendo escalones e irás arbitrando en categorías cada ves más altas.

No conviertas tus ganas de ascender en una obsesión puesto que esto solamente se logra con paciencia y mucha dedicación. Todos los grandes árbitros han pasado antes por todas las categorías que tú vas a arbitrar y para llegar a ser un árbitro de fútbol profesional no es algo que consiga todo el mundo. Dedícate a arbitrar tus partidos con la máxima profesionalidad e irás viendo una evolución a lo largo de los años tanto en tu arbitraje como en tu posición dentro del Comité.

Para finalizar, te recomendamos que disfrutes del fútbol desde otro punto de vista, el del árbitro. Puede darte grandes experiencias y te ayudará a crecer a nivel personal.

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Preguntas frecuentes sobre árbitro de fútbol