Squash ✅ Qué es, historia, reglas de juego, pista, raquetas
Seguramente alguna vez te has entretenido lanzando una pelota contra una pared. Puede ser un gesto muy sencillo y repetitivo pero, de esta misma forma se inventó el deporte del squash. Todo comenzó con una pelota y una pared y, a día de hoy, más de 20 millones de personas practican el squash como deporte en todo el mundo.
A pesar de su sencillez, el squash fue considerado en 2003 como el deporte más saludable por la revista Forbes. Si quieres saber qué es el squash, conocer más sobre su historia o aprender cuáles son sus reglas, este es tu artículo.
Además, te mostraremos todo el equipamiento necesario para practicar este deporte y te recomendamos las mejores opciones del mercado. Descubre qué tener en cuenta a la hora de comprar unas zapatillas o pelota de squash. Asimismo aprende a elegir la mejor raqueta de squash. ¿Cuál raqueta tiene las mejores valoraciones? ¿Qué raqueta de squash es la más barata? ¿Y cuál es la más ligera? Te dejamos todas las claves para triunfar en este deporte.
También podría interesarte: Reglas del tenis en resumen 🥇 ITF, historia, juego básico, saques, sets
Contenidos
¿Qué es el squash?
El squash es un deporte en el que, con una raqueta, se golpea una bola de goma contra una pared. Se practica en un espacio interior con dos jugadores. La pelota es de goma y puede tener distintos grados de velocidad o rebote. El grado de velocidad o rebote de una pelota se identifica por los distintos colores de la pelota.
Los jugadores golpean la pelota con sus raquetas haciéndola rebotar en la pared frontal de la cancha. La pelota puede rebotar en todas las paredes cuantas veces sea necesario y en cualquier orden. Aun así, siempre ha de golpear obligatoriamente en la pared frontal o frontis antes de tocar el suelo. Solo puede rebotar en el suelo una vez antes de que se considere un punto para el contrincante.
Origen y historia del squash
El squash nació en las cárceles londinenses del siglo XVIII. En aquella época, los reclusos dedicaban su tiempo a jugar lanzando las pelotas contra las paredes. Posteriormente las escuelas británicas fueron adoptando esta actividad y fue en ellas donde el juego terminó por desarrollarse.
Uno de los colegios que más influencia tuvo en la historia del squash fue Harrow School. De hecho, se considera que fue allí donde el deporte tuvo origen como tal, alrededor de 1830.
Los alumnos jugaban con las pelotas y raquetas de tenis contra las paredes del patio. En algún momento, los niños descubrieron que las bolas pinchadas y con menos presión daban más variedad al juego. A partir de ese descubrimiento también empezaron a modificar las raquetas de squash para hacerlas más pequeñas y manejables en el reducido entorno en el que se desenvolvían.
Desarrollo como deporte
El squash se hizo cada vez más popular y fue copiado por otros colegios. Sin embargo, a las autoridades del Harrow School les preocupaba la peligrosidad del juego en un entorno lleno de tuberías, chimeneas o cornisas. Como consecuencia construyeron la primera pista de squash en 1864. Poco a poco, más escuelas, clubes e incluso particulares comenzaron a copiar la idea de construir canchas específicas, aunque sin existir unas medidas estándar.
A pesar de la popularidad del deporte a lo largo del siglo XIX, no fue hasta 1923 cuando se empezó a hablar de la unificación de las normas del squash. Hasta 1928 no se llevó a cabo de manera definitiva.
Desde entonces hasta la actualidad, el squash ha seguido evolucionando. Sus distintos componentes, especialmente las raquetas de squash, han ido adoptando los principales avances técnicos y de materiales que aparecieron en otros deportes como el tenis.
Actualmente, el squash es un deporte practicado por más de 20 millones de personas en todo el mundo. La World Squash Federation está reconocida por el COI, lo que significa que este deporte podría llegar a formar parte de unos Juegos Olímpicos.
Reglas del squash
Antes de comenzar a explicar las reglas, hay que aclarar que existen distintas variantes del squash. Para explicar las reglas de este deporte, nos centraremos en su vertiente más practicada: la internacional.
¿Cómo ganar un partido de squash?
Un partido de squash se compone de 5 juegos. Gana el jugador que se imponga por mayoría, es decir, quien gane 3 de los 5 juegos. También pueden disputarse partidos de squash de 3 juegos. En este caso, serían 2 los juegos necesarios para ganar el partido.
A su vez, cada uno de los juegos se disputa a 11 puntos con una diferencia de 2. Es decir, en caso de que haya un empate de 10-10 o superior, el juego continúa hasta que un jugador aventaje al otro en 2 puntos. Cuando un jugador gana un rally (un juego), suma un punto a su marcador y obtiene el servicio.
El servicio o saque
Una vez un jugador gana el punto, obtiene también el saque. Al poseer el saque, el jugador puede elegir la caja de servicio que prefiera. Sin embargo, en caso de que siga ganando puntos de forma consecutiva y mantenga el saque, está obligado a alternar el área de saque. En caso de que el punto termine en let y haya que repetirlo, el saque debe ejecutarse desde la misma caja.
Se considera que el saque es correcto si:
- Al menos uno de los pies del sacador está dentro de la caja de servicio, sin tocar ninguna de las líneas. El otro puede estar dentro, fuera o sobre la línea.
- La pelota golpea directamente la pared frontal por encima de la línea de saque y por debajo de la línea de fuera, sin tocar ninguna pared lateral.
- Si la pelota rebota contra el cuarto trasero contrario al que ocupa el jugador que hizo el saque. Cabe destacar que no es necesario que la pelota bote en dicho cuarto, puede rebotar contra la pared o ser voleada por el restador.
¿Cómo se ganan los puntos?
Una vez ejecutado el saque, los jugadores se alternan para golpear la pelota contra la pared frontal. Aunque puede rebotar contra las otras tres paredes, por debajo de la línea de fuera, los jugadores siempre deben golpearla en dirección al frontis.
La pelota puede rebotar contra las paredes las veces que se quiera, ya sea antes o después de haber botado en el suelo. La única condición es que solo haya un único bote por rally.
Los jugadores pueden moverse libremente por la pista y golpear la pelota hacia el lado que consideren oportuno. El cuarto hacia el que debe dirigirse la pelota sólo está restringido durante el saque.
Gana el punto el jugador cuyo oponente:
- No puede devolver la pelota antes de botar 2 veces en el suelo.
- Manda la pelota por encima de la línea de fuera (frontal o lateral).
- Golpea con la bola la lata.
- Comete interferencia.
- Toca la pelota con el cuerpo, salvo que se considere saque o devolución inadecuados.
Interferencia, Let y Stroke
Dado que el terreno de juego es reducido y común para ambos jugadores, durante el desarrollo de un rally, cada uno de ellos debe procurar no interferir en el juego de su rival.
Una vez que ha mandado la pelota contra el frontis y toca devolver a su rival, el jugador debe permitir una correcta visibilidad de la bola. El rival, además, debe tener espacio para acceder a ella y golpearla con la amplitud adecuada y desde la posición que considere oportuna. Por supuesto, debe dejarse espacio para que la pelota del rival llegue nuevamente a la pared frontal. Si incumple alguno de estos requisitos, se considera interferencia.
A pesar de todo, es inevitable que en ocasiones ocurra esta situación. En esos casos, el jugador al que le toca golpear puede desistir de su devolución y parar el juego solicitando »Let». Se trata de una repetición del punto cuando se considera que ha habido una interferencia o también que pueda haber causado daño al rival.
El árbitro será quien decida el resultado de esta petición:
- Sí Let en caso de que hubiera una interferencia, pero el jugador tratase de evitarla. Si ocurre esto, el punto se repite con el mismo marcador y el mismo sacador desde la misma caja de servicio.
- No Let en caso de que no hubiera interferencia ni temor razonable de lesionar al oponente. En este caso, se asigna el punto al jugador contrario.
- Stroke en caso de que haya interferencia y el jugador no tratase de evitarla. Entonces el punto se suma al jugador que hizo la solicitud.
También podría interesarte: Reglas del pádel 🥇 Campo, Pelota, Pala, Jugadores, Saques, Puntuación
Variantes del squash
Como ya hemos mencionado, la versión del squash más promovida en el mundo es la internacional. Esta variante del deporte es la basada en el squash original que nació en Reino Unido. Sin embargo, existe otra variaciones del squash:
Hardball Squash
El hardball squash apareció en Estados Unidos en el siglo XIX. A diferencia del squash internacional, el hardball squash se juega con una pelota más dura. Por tanto, en este deporte la pelota bota más rápido. La cancha también tiene unas dimensiones diferentes, siendo más pequeña.
Squash Tennis
El squash tennis se practica en una pista más pequeña que la del squash internacional. Por otro lado, las pelotas utilizadas en esta variante del deporte son más similares a las que encontramos en el tenis.
Racquetball
En este caso, la variación entre el racquetball y el squash internacional no está en el equipamiento sino en las reglas. En esta variante del squash, las paredes no tienen ningún tipo de zona ilegal. Además, la pelota también puede rebotar en el techo.
Pista de squash
La cancha de squash individual tiene una superficie de juego de 9,75 x 6,40 metros. Además, está rodeada de paredes a los 4 lados. En el caso de las pistas de squash dobles, las medidas cambian ya que el ancho pasa a ser de 8,42 metros.
La pista está dividida en dos partes: un área frontal y otra trasera. Por otro lado, el área trasera, a su vez, está dividida por la línea de media cancha. De esta forma nos quedan 3 cajas: la mitad delantera y los dos cuartos traseros. En cada uno de esos cuartos se ubican las dos zonas de saque.
Las 4 paredes laterales que envuelven la pista de squash también forman parte de la cancha. Se trata de superficies »jugables» dado que la pelota de squash puede rebotar en ellas. Todas tienen un nombre concreto:
- Pared frontal o Frontis
- Paredes laterales
- Pared posterior
La pared frontal cuenta con una línea de servicio y una línea de fuera. Esta última línea también se extiende por todas las paredes laterales. Luego, la línea de fuera va descendiendo a medida que atraviesa las paredes laterales hasta llegar a la pared posterior. En la parte inferior también se encuentra la »lata», delimitada por el suelo y la línea más baja del frontis.
Equipamiento para squash
A la hora de jugar un partido de squash, hay dos elementos imprescindibles: la raqueta y la pelota. Por otro lado, como añadido, los jugadores pueden incluir unas zapatillas especializadas o gafas protectoras a la hora de practicar este deporte.
Pelota
La pelota de squash está fabricada de goma y formada por dos piezas. Ambas se unen y crean una esfera hueca y de color oscuro. La pelota de squash tiene un diámetro de entre 39,5 y 40,5 milímetros. En cuanto a su peso, tiene que oscilar entre los 23 y los 25 gramos.
Según la composición de la goma con la que están fabricadas, las pelotas de squash tienen distintos comportamientos. Por eso existe una categorización de las pelotas basadas en puntos de colores que indican la velocidad de juego y el tipo de rebote (alto o bajo). Una misma pelota también puede verse afectada por la temperatura, la altitud o las condiciones atmosféricas.
En general, las competiciones internacionales utilizan las pelotas con doble punto amarillo. Estas son las más lentas y con un rebote más bajo que el resto. Esto facilita que queden muertas, complicando un poco más el juego.
Zapatillas
Las zapatillas de squash cuentan con suela especialmente diseñada para jugar sobre superficies muy deslizantes. De esta forma se consiguen evitar los resbalones durante los partidos de squash. Además, también tienen una mejor amortiguación que las zapatillas de cualquier otro deportes. También cuentan con sistemas que permiten cambiar de dirección y velocidad de juego sin riesgo para las articulaciones. Con estos sistemas principalmente se trata de proteger los tobillos y las rodillas.
Características de una raqueta de squash
Las raquetas de squash son muy similares a las de tenis. Sin embargo, presentan una superficie mucho más alargada. Al igual que las raquetas de tenis, las de squash suelen estar fabricadas en carbono, titanio, aluminio o grafito. Dependiendo del material, tenemos un amplio abanico de características y precios, según si son para uso amateur o profesional.
La raqueta de squash puede tener una longitud máxima de 686 milímetros y un ancho de 215. La zona de encordado no puede rebasar los 500 cm2. En cuanto al peso, el máximo permitido es de 255 gramos, aunque habitualmente son bastante más ligeras: no suelen superar los 150g.
Partes de la raqueta
La raqueta de squash tiene múltiples partes. La forma en que sean cada una de estas partes dependerá la eficiencia de nuestro juego. A continuación os explicamos cada una de las partes y su función:
- Cabeza: Tiene forma ovalada y a diferencia de la raqueta de tenis, tiene la punta aplanada. El tamaño de la cabeza indica tu propósito de juego: cuanto más grande sea, más potencia genera. Las pequeñas aportan mayor precisión y posición.
- Cordaje: En las más caras y profesionales suelen estar fabricados de tripa natural. También podemos encontrarnos con cordaje de monofilamento (mayor durabilidad, pero menos agradable al tacto) y de multifilamento (son las más usadas).
- Garganta o eje: Es el nexo entre el mango y la cabeza de la raqueta de squash. Determina qué tipo de trayectoria llevará tu bola. Si eres principiante, es recomendable un cuello abierto, ya que resulta más fácil golpear la bola. En cambio, para los jugadores más expertos es mejor el cuello cerrado para mayor potencia.
- Grip: Solo existe un tipo de grip en el mercado. Si deseas un agarre diferente, la opción es cambiar las cintas. Sirven para evitar el sudor y para hacer más grueso el grip (para que se adapte mejor a la mano). Hay que tener en cuenta que un mayor grosor hará perder el control al uso de la raqueta de squash.
Cómo elegir la mejor raqueta de squash
En deportes como el squash, la raqueta es el componente más importante. Por tanto, a la hora de escoger una raqueta de squash es importante tener en consideración algunos aspectos claves. Las características de tu raqueta son vitales para lograr aprovechar al máximo todas sus ventajas:
- Si buscas precisión, optarás por una raqueta con mayor peso en la cabeza
- Para un juego más rápido, quizás optes por un grip más largo o más corto según sea tu estilo.
- Si quieres una raqueta que te permita desplazarte de la mejor manera posible, deberás fijarte en el peso. Con una raqueta de squash más ligera lograrás desplazarte de forma óptima sin provocar tanta fatiga. Además, obtendrás todo el control al deslizar la mano.
Siempre es posible encontrar una unidad barata en el mercado. Actualmente todas las raquetas de squash cuentan con un fascinante diseño. Además cada vez están más adaptadas: son ligeras de peso y tienen un estupendo balance.
Sin embargo, antes de comprar una raqueta de squash deberás tener en cuenta algunos factores. El peso, el tamiz, el equilibrio, el cordaje, la tensión o el calibre determinarán tu modo de juego. Las raquetas, al final, deberán ser como una extensión del propio brazo si lo que queremos es sentirnos cómodos.
Comprar raquetas de squash baratas y de calidad
Después de conocer los aspectos más importantes de una raqueta de squash, te mostramos algunas de las mejores del mercado.
La raqueta más valorada
La raqueta de squash Tecnifibre Carboflex es una de las mejor valoradas del mercado. Esta raqueta está hecha de grafito. Además, viene disponible en varios pesos para que tengas una mayor rapidez y tolerancia en el juego (125/ 130/140 g).
Los colores disponibles para este producto son negro y amarillo. Los usuarios recomiendan mucho este producto, ya que brinda mayor poder a la hora de golpear la pelota y también un mayor control.
La raqueta más económica
La Dunlop Blaze Inferno 3.0 es una de las raquetas de squash más económicas del mercado. Está elaborada de grafito de primera calidad y tiene un tamaño de cabeza de 500 cm2. El producto viene ya encordado de fábrica.
Es una buena opción dada su calidad y precio. Podrás disfrutar de todos los beneficios que esta raqueta te puede dar como rapidez, poder, maniobrabilidad y durabilidad.
La raqueta más ligera
La raqueta HEAD Nano Ti 110 se presenta como una de las raquetas de squash más ligeras del mercado. Si eres un jugador amateur o intermedio, puede ser la opción ideal para ti. Gracias a su ligero peso tendrás mayor velocidad y poder a la hora de golpear la pelota, permitiéndote controlar tu fuerza y movimiento.
Está elaborada con materiales de alta calidad como el titanio y la fibra de carbono. Los usuarios la recomiendan por su durabilidad.
La raqueta de mayor calidad
Por último, hay que mencionar la HEAD Graphene Squash Racquet Series. Esta raqueta es propiedad de HEAD, una marca que suele ofrecer mucha calidad de sus productos. Viene disponible en varios pesos para adaptarse a los gustos de cualquier persona (115, 130 y 135g).
Esta raqueta de squash está hecha de grafeno, un material de cristal de carbono que le da un toque futurista. Los usuarios la recomiendan debido a su gran maniobrabilidad, poder y resistencia. Es la más cara de todas las opciones que presentamos.
También podría interesarte: Cómo organizar un torneo de pádel: inscripciones, promoción, patrocinadores
Buenas Toni, nos alegra saber que te ha gustado nuestro artículo y que te ha resultado interesante. ¡Muchas gracias por tu comentario! ¡Un saludo!